Nació en Buenos Aires el 1 de enero de 1937. Estudió con Silvio Bermejo de Orortia y en los talleres de Oscar Capristo, Vicente Forte, Luis Barragán, Noé Nojechowicz y Néstor Cruz. Viajó por España, Francia, Inglaterra, Grecia y Estados Unidos. Realizó muestras individuales en galerías Van Riel en 1965, Brané en 1967 y 1968, Galatea en 1971, Picasso en 1972, Atica en 1973, Laasa en 1973 de donde fue artista exclusiva, y Cassará de Mar del Plata en 1977. Expuso en el Salón Municipal Manuel Belgrano en 1963, Salón del Toro en Soria España en 1966, Salón Municipal de Rafaela en 1969 y Museo de Arte Moderno de Mendoza, entre otras. “Temas de nuestro campo, el dilatado paisaje pampeano y los animales que lo pueblan, suscitaron su interés inicial. Resolvió su transposición plástica con un espíritu vigoroso, impulsivo y de decidida espontaneidad. El automatismo y la obediencia a los hallazgos del azar no fueron ajenos a su estructuración de las formas mediante síntesis y ordenaciones rítmicas de líneas y de masas. Pero, posteriormente su pintura derivó hacia una temática imaginativa de curiosas ciudades irreales situadas en ámbitos misteriosos o de fantasmales fortalezas erigidas en peñascos que emergen de aguas insólitas. Realiza estos motivos de fisonomía onírica mediante una factura de dibujo preciso, de estructuras simplificadamente definidas, casi geometrizadas, y de vivos contrastes de valores tonales que se destacan merced a la incidencia sobre sus formas, de una luz de trasmundo en enigmáticos ámbitos de silencio”. (Córdova Iturburu, Ochenta Años de Pintura Argentina, Editorial Librería de la Ciudad, Buenos Aires 1978; Enciclopedia del arte en América de Vicente Gesualdo, Editorial Omeba, Buenos Aires 1968; Plástica Argentina 1976 de Gregorio Goldemberg, Pluma y Pincel 1977).