Escultura

Alberto, Domingo S.

Córdoba
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Nació en San Antonio, provincia de Córdoba el 30 de diciembre de 1910 y falleció en San Francisco, Córdoba en 2000. Pasó su adolescencia en la ciudad de Córdoba, y más tarde en Rosario donde perfeccionó su aprendizaje en dibujo y pintura. En 1936 se instaló en San Francisco, donde se dedicó al dibujo, la escultura y la pintura. Aprendió solo, compró sus herramientas y probó con diversos materiales. Relató que “Siendo jovencito, de sus manos brotaban creaciones realizadas en jabón que después eran utilizadas como moldes de repostería”. Dictó conferencias e ilustró libros y diarios. Pintor y escultor, desde 1954 trabajó las dos técnicas de forma indistinta. Concurrió al Salón Nacional en 13 ocasiones, al Salón de Rosario, de Santa Fe, de Bahía Blanca en 1948 y 1950, de Santiago del Estero, de Mar del Plata en Pintura en 1949 y Escultura en 1944, de Córdoba, Marcos Juárez, Villa María y a otras muestras colectivas. Individualmente expuso óleos y tallas en madera en el Centro Cultural y Biblioteca Popular de San Francisco en 1953 y 1978. Obtuvo el Segundo Premio en el Salón de Villa María en 1949 y el Primer Premio de Escultura en el mismo salón en 1950. Autor del monumento al Labrador en Freyre, Santa Fe, General Savio en San Francisco y a la Madre en Laspiur. Poco conocido como pintor, es viable afirmar que por su admiración hacia Fernando Fader, su tratamiento pictórico puede ser tildado de impresionista. Dijo: “Soy pintor, pero prefiero vocacionalmente la escultura”. Escultor expresionista, sus primeros modelados denotan un mayor realismo, luego pasó a un expresionismo mágico simplificando las formas. Tiene dominio de la materia: trabaja con la misma soltura piedra o yeso, pero su preferida es la madera.